Al son de los tacones
los flancos ondean
mórbido proceder,
tu mirada de captura.
Los dedos ahusados
siguen el hilo de nylon
en el tintín de plata
de las campanillas
que adornan el tobillo.
He aquí... un taconeo
el correr lento
sobre la desnuda piel
en la candor túrgido
de los muslos que se aprietan
en la última defensa...
el estremecimiento se expande
en el arquearse espalda
hasta sobre los túmidos labios
Los mordiscos en el placer
se persiguen
sobre el seno perlado de suspiros
incesante, rítmica danza
de corazones y almas
sinuosidad de cuerpos forjados
al fuego del flamenco.
En el estruendo ensordecedor
del último golpe de tacón
sobre las paredes del corazón...
rasguñas gritando mi nombre
Amor
en la página de la eternidad.
Greg D.
Tintineando van los zapatos de plata fina que al son del taconeo, bailan los tobillos, alzando sonidos acampanillados, mientras los versos que albergan la pasión, se dejan moldear por los ritmos de la danza.
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