Libertad

Era cual paloma enjaula, paloma bella y cuidada. Tu me dabas todo los  cuidados, comida, agua y hasta compañía. Mi jaula de oro y cristal desde ella tenia,  bellas vistas de un parque, donde veía a otros de mi especie, aves de mil colores, de distintas formas y tamaños. Uno de ellos, me llamo la atención pues siempre volaba hasta mi ventana e intentaba abrirla, me saludaba y hacia cosas tontas que me hacían reír. A mi me agradaba su compañía, llegabas tu y todo lo de fuera se me olvidaba, eras tu mi amor, mi compañía. Cada día que pasaba mas me gustaba mirar hacia fuera, yo pensaba pobres de ellos que frío tienen que estar pasando, sin comida ni casa donde descansar tranquilo. Mi querido gorrión por mucho frío y desamparo seguía llegando  a mi ventana, despertó en mi un cosquilleo en mi interior, el me hablaba de lugares maravillosos, de ríos donde todos se bañaban, montañas tan altas que jamás llegarían. Entre los dos surgió una espera, una ilusión por vernos, aunque fuera entre cristales. Tu te distes cuenta y te enfadaste, me encerraste en mi jaula de oro y cristal, cerraste las cortinas, hasta intentaste eliminar a mi gorrión. Oh, pobre de mi, me di cuenta que no me querías tan solo era para ti un trofeo. Cuanta razón llevaba mi gorrión al decirme ...No te tengo envidia, tu tienes de todo lo que yo no tengo pero no tienes lo que yo mas aprecio, mi libertad.

M.M.R

© Manoli Martín Ruiz