EL AMOR, esa Prisión

 



 

Esa prisión que Amor se llama,
nunca sabe escuchar
ni tan sólo los silencios,
sólo sabe que llorar
los recuerdos del pasado,
y no sabe qué oírte
tanto tiempo andado
para que nada te calme,
viéndote en soledad reclamada
no oye ni escucha ni trata ni calma,
huye de sentimientos cercanos
cuando tiene los suyos al lado
sin saber, no comprende
los estremecimientos próximos,
tan sólo sabe que escucharse a sí mismo
de tanto hablar se deshace
reclamando ese sonido
sin saber atender meramente la realidad.

Si no sabes lo que es el Amor,
hay que vivirlo para olerlo
pero no todo es Amor,
no hay que dejar pasar el tiempo
sin más y nada más,
Amor, no es reñir y soñar
es saber seguir los latidos
que los sentidos te muestran,
el abrazo inerte se muere
y se duerme a su lado.

El Amor, te hace sentir en la prisión
que del olvido te rechaza,
por eso me olvidé
lo que realmente significa
esa fácil palabra… Amor,
mi pecho se regaba
de un Amor intransigente,
por eso… me marché
no sintiendo ese Amor,
que me olía a descaro
sin tener un sentido locuaz.

Yo en esa prisión me sentía,
entre tus lágrimas y tus verdades
atrapada me hallaba,
como si fuese un objeto
sin ton ni son
los miedos en sí aparecieron,
ya no tenía esa ansía
de seguir andando sin nada
durante un camino inhóspito,
que me hacía padecer
más qué sentir cariño o Amor.

Ya las cosas no tenían el mismo sentido,
apariencias entre medias
no me valían la pena,
ya no podía por más
que ver una antipatía sin realidades,
me sentía atrapada
entre el hielo y el temor,
sin respirar ni casi hablar
las palabras se hacían tensas
y los sentidos prácticos no son,
era un Amor ingrato y sin motivo.

Aunque sincera me siento,
si puedo contarte que ya no quería
tener nada contigo,
porque realmente no me salía
ese Amor cercano,
las palabras las siento
como algo próximo
y tú no me dejabas,
querías hacerte con mis sentimientos
sin dialogar mi aprobación,
hasta ahí no llego
por más que quisieras
yo no deseo un Amor incomprendido,
y creo he acertado
cortando las raíces por lo llano,
si los sentidos son exactos
no deseo sentimientos inciertos
que no me dejen ser yo misma,
y no te miento porque no sé mentir
ya no siento ese Amor que anhelaba,
me ahogaste con tus miserables broncas
queriendo hacerte con mi control,
¿sabes lo que has querido conseguir?
fácilmente te lo puedo contestar…
no es odio, porque odio no siento
pero sí has echado al Amor de tu lado,
ya no deseo estar a tu vera
no me haces falta para nada,
mejor y más feliz
quiero vivir mi soledad
entre mis amistades,
que aunque siempre decías
no saben comprender realidades
y si alimentarse de irrealidades,
he de contestarte…
que las razones no aparentes
hundían te entre las miserias
que tu alma llevaba encima,
las amistades apoyan y te quieren
aunque ese querer diferente sea,
algunas veces…
te sientes capaz de seguir caminando
sin acompañarte realmente el Amor.

No me valen los cinco minutos
para que te olvides lo hablado,
no me gustaban esos Cobros
que siempre comentabas,
por todo y por nada
a todas horas cobrabas,
esas ansias tuyas irracionales
me cortaban las alas,
parece que para ti
no todo era igual
porque sólo valorabas
todo aquello que pudieses recaudar,
se conoce debías sentirte
el hombre que quizás no fuiste nunca.

Esos reproches infundados
a cada momento
ya se salían de sitio,
y nunca entendí
tal convencimiento inútil,
porque para mí
ese sentido insolvente
no significaba lo mismo,
me hacías sentir
que la práctica era tuya
pues quizás
no debieras pertenecer a este mundo,
ya que los ancestros
removían mis entrañas
cada vez que debería pagarte.

Jamás en la vida
había escuchado tal barbaridad,
cuando comentabas…
¡no te preocupes, ya me lo cobraré!

La primera vez que te oí decirlo
no sabía exactamente
lo que quería significar…
pero, luego aprendí
lo qué realmente tú sentías
cada vez que lo pronunciabas.

Simplemente creo firmemente
que tú no querías realmente,
tan siquiera solicitabas
aquello que nunca pudiste conseguir
en esa vida anterior
que te segó por medio
aquellos sueños de juventud,
que con el tiempo fuiste perdiendo
sin medida ni comprensión.

Ahora te debates
entre el presente y el olvido,
¡te hemos dejado de nuevo!
porque tú no has sabido hacerlo a tiempo,
esperas lograrlo todo
sin la medida suficiente,
y para todo ello
nunca fuiste legal,
casi siempre te escondías
del mundo exterior
cuando encontrábamos,
esos alguienes a quién hablar
por no tener que dar explicaciones
te saltabas las modalidades
tan automáticamente,
que ya no merecía la pena
convertirse en carne de cañón
si siempre evitabas las ocasiones.

Ahora… ¿qué has logrado?
tú muy bien lo sabes,
pero seguramente no lo querrás aceptar
ya que no todo es lo mismo para ti,
tú seguirás escondiéndote
mientras que yo,
nunca me he escondido
pues no me hace falta.

Tú, cuando me conociste
no supiste apreciarme
hasta que pasaron varios meses,
no te daba confianza
ni tampoco tenía carisma para ti,
eso en verdad
suele hacer mucha pupa,
cuando lo oyes decir
de ese alguien
que piensas te quería.

Tus movimientos inexactos
acabaron con mis paciencias,
y mira por donde
que he tenido muchas…

A ti hay que darte las gracias
por todo y por nada a la vez,
te descuelgas de todo lo normal
sin intentar comprender
lo que significa la realidad.

Un día no muy lejano,
te escuché decir…
“tan sólo te echo a faltar
los fines de semana,
porque… los otros los tengo ocupados
como tú ya sabes…”,
y ni te imaginas que significaron esas palabras
tan vagamente dichas…
aunque ya no era todo igual,
tú ya no significabas nada en mí vida
te habías encargado muy bien
de decirme lo que debía hacer,
pues las palabras ajenas
para ti significan mucho más
que lo que yo pudiera ser en realidad.

Siempre el qué dirán…
era lo primordial,
y en muchas ocasiones
te has guiado
más por lo que te decían
que por lo que yo realmente pensaba y deseaba.

Tus principios ajenos
tenían todo a decir
y a la vez, nada que opinar.

No sabías diferenciar
entre los ajenos y mí Amor,
que pensándolo bien
¡ya es gorda!…
pero, de todo eso
te sueles dar cuenta,
cuando el tiempo ha ido pasando
y los recuerdos primeros
van saliendo poco a poco a la palestra.

Todo sale y todo queda,
pero nada es igual
ya las diferencias existen
y no volverán sobre sus pasos,
casi sin saberlo
te has ido de mi lado
y tus sentidos
ya no son lo que eran,
me olvidé
que realmente existes
sin compaginarte
ya no te diviso,
tampoco te siento
ni pretendas hacerlo,
pues caerías en el gran error
y conseguirías que logre
sentir antipatía absoluta,
algo que realmente no merece la pena
por no ser exactamente una realidad
que ya no se puede plasmar
ni tan sólo, con los dedos de la mano.

No sabes escuchar
cuando te dan un NO,
te saltas a la torera
todos los significados,
solamente te guías por tus instintos
sin querer hablar
te promulgas tú solo,
tan sabio… que eras…
yo no comprendo nada
no he visto listeza
sino incomprensión, sin nombre.

No sabes escuchar ni oír la verdad,
sólo oyes lo de los otros
que quizás para ti sea más importante,
pero yo he visto
lo que no quería ver,
y los papeles baratos
no me hacen sentir realidades.

Tú decías que me sabías tratar,
pues yo te puedo decir…
que no has sabido hacerlo bien,
mientras pensabas
lo que tenía que hacer yo realmente,
ya los demás… te ponían las voces
y tú… les seguías inmediatamente.

El Amor, se comparte
pero no se distribuye,
no se puede ni se debe
provocar una indiferencia
que luego llega más allá de lo anormal.

Por el Amor, hay que luchar con sencillez
no con artes castrenses,
eso quedó ya en el olvido
y ahora, la vida es más sencilla
sin necesidad de complicarla
más de la cuenta.

Al Amor, no hay que ordenarle
ni tampoco agobiarle
con insensatas razones
que a ningún sitio van,
al Amor, hay que cuidarlo
con esmero profundo,
queriéndolo en todo momento
sin mirar lo que dirán los demás,
si no se puede convertir
en un Amor irracional.

Ahora, ya no puedes hacer nada
pues ese Amor, se terminó.

Las razones exactas
tú muy bien las sabes,
pero no las quieres comprender
porque, te sobrepasan
y ahora… ¿qué vas a contar?…
sencillamente, seguirás
con tus razones presentes,
pero en el olvido
ya han quedado para siempre.

Mentirás a tus amistades,
por no acatar las verdades
que de lleno te has trabajado,
no sabrás cumplir tus compromisos
si siempre estás pensando
en la misma cuestión irreal.

Tú y solamente tú,
lo único que buscabas
era una compañía
para el día de mañana,
para acurrucar tu frío
en las noches invernales,
y así no quedarte helado
la primavera y el otoño,
no es lo correcto hoy en día
quizás antaño lo fuera,
pero ahora mismo
eso se desboca por completo,
aunque tus pensamientos son ancestrales
como tú vida misma.

Después del tiempo pasado
que han sido muchos meses,
compartiendo una compañía
justamente inexacta,
resulta que las verdades amañadas
salen a la luz con facilidad,
¡no se puede olvidar
a ese alguien,
con la cual no has convivido
que por no encontrar
no se ha conocido!,
las mentiras encubiertas
rezuman la lejanía,
más que esconderte ahora
te has puesto bien al descubierto,
ya he sabido con certeza
la clase de Amor
que tú querías…

Quisiste alquilar una Prisión
para compartir un Amor
que parece no sentías…

¡Qué pobre!

Ni tan siquiera
has sabido nunca realmente
lo que significa querer y amar,
no es lo mismo
Amor que mentiras,
pero… para ti todo es lo mismo
confundes la realidad con la extrañeza,
las palmaditas y la confusión
es lo que realmente muestras
para aparentar lo que no eres.

Al Amor, no hay que ordenarle
ni tampoco agobiarle
con insensatas razones
que a ningún sitio van,
al Amor, hay que cuidarlo
con esmero profundo,
queriéndolo en todo momento
sin mirar lo qué dirán los demás,
si no se puede convertir
en un Amor irracional.

Palencia, jueves 18 de junio 2009.
©Mía Pemán

*** Lo publiqué en mi blog hizo ya tres años. Hoy lo vuelvo a subir, que ya lo tenía pensado desde hace varios días, por el día que es, pero, NO, por dar nada en concreto. Fue algo nefasto, no solo el primero, y sí una segunda vez, por otra desgracia de persona, que ni da el caso, pero, por igual se portaron, como lo peor de las artimañas que hay en este mundo insólito.



Las amistades y la familia, si te ayudan, como me pasó a mí, fue por lo que pudieran sacar de ello, los cotilleos, las risas, las habladurías y quien sabe qué cosas más. Cuando a mí alguien me pide ayuda, no miro esas cosas, o ayudo o no. Pero, luego no voy dándole la razón al otro ser despiadado y a la persona que ayudo, la dejo en una ciénaga, para que se pudra. ¡Esto no va conmigo, ni ahora, ni antes, ni nunca!



Y, el teléfono para estas ayudas, no sirve para nada. Tan sólo, para formar parte de una estadística, porque… hay protocolos, que hay que seguir, y si te toca, bien, y si no... te aguantas. ¡Pues, las injusticias, las marcan ellos y con ello, dan la razón a quienes te infringen daño, así de simple y sencillo, por mucho que no lo quieran ni ver!



Si quisieran erradicar este gran mal en la sociedad actual, ya lo habrían hecho. Más, no es el momento, les gusta ser partícipes de esas ayudas y poder salir en las fotos, sin haber dado ni la mano… Aquí, hay de todo y a la vez, de nada. ¡No desean que se terminen “los maltratos de género en los dos sexos” por qué no interesa en absoluto. En sí, no son interesantes tantas cosas que nos siguen haciendo daño, que da la impresión, de que el mundo se subsiste de todo ello, porque, no tienen ni pajolera idea de lo que han de hacer, y primero de todo, porque, no saben intentar dialogar con las personas implicadas directamente. Es absurdo decirlo y pensarlo, pero, es que, es totalmente cierto, y da pena, tristeza y malestar general***.





©Mía Pemán – miércoles25noviembre2M15

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Comentarios

  1. Muy triste Mía, el amor amor es libertad y confianza!
    Malditos quienes pegan a una mujer o la violentan
    Un abrazo

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  2. Es muy cierto, Carmiña...
    En este caso, no hubo eso, pero... sí otras cosas... no descritas, pues, sería muy crudo reflejarlo...
    Un abrazo,

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  3. Tremenda historia, Mía. Da que pensar y mucho... Un abrazo,

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  4. Así es, y es cierta, vivida en primera instancia... Un abrazo, Javier...

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  5. ...ME GUSTA....
    Triste pero como tu dices real y somos muchas y muchos quien lo hemos vivido, lo gratificadte es poder al final contarlo pues así es un poquito de liberacion. besotes Mia

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  6. Muy bueno, amiga, y muy fuerte... a la vez, real.
    Besicos y buenas tardes. :)

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  7. Gracias, Manoli.
    Así es, la verdad, qué aunque sea duro decirlo, la vida, es un contratiempo a cada momento y a veces, no sabe cuidarnos cómo nos merecemos, qué tanto para el hombre como para la mujer, nos pone ciertas personas delante, que no nos merecemos para nada.
    Un beso grande,

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  8. Buenas tardes, Aslaram...
    Celebro te haya gustado, aunque sea un poco fuerte, al menos, fui capaz de poderlo escribir en su día...
    Un beso grande,

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  9. Muy bueno y reflexivo, Mía. Mi felicitación por tu excelente trabajo. Un beso.

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  10. Me ha conmovido mucho tu historia Mia... qué rabia me da que exista gente de esa clase... y no se extingan de una vez por todas.
    Un beso enorme

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  11. http://img15.dreamies.de/img/36/b/qmm3n0ns9jn.gif

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  12. Eso debería de pasar... pero, YA... sin dejar pasar más el tiempo.
    Pero, a nadie le interesa... Les gusta demasiado estar en primera fila y que les hagan las fotos y salir en primera plana de todos los medios de comunicación.
    Parece es "un gran triunfo" y luego, alardean de ello, como un gran premio.
    Pero, eso pasa, porqué, ellos no lo han sufrido en sus propias carnes, si no... ya veríamos a ver qué pasaría.
    Un beso grande, Araceli

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  13. Celebro te haya gustado, Julie, esta historia que real fue en sus días... en tres ocasiones distintas... pero, al final, aquí estoy, para poderla contar y aunque, hubo personas que no me apoyaron en aquél último momento y me recriminaron, haber enviado a darse un larguísimo paseo, al último indeseable y malencarado personajillo.
    Un beso grande,

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  14. Te apoyaste a tí misma y eso te ha salvado, Mía. Un beso fuerte.

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  15. El amor no destruye...construye,anima ,ayuda ,esta a tu lado...
    ese otro amor tan solo es veneno dosificado...
    muy bueno Mia

    un beso

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  16. Sí, así es, Julie, porqué, quienes me podrían haber ayudado, no lo hicieron.
    Una pena, pero, así fue.
    Un beso enorme,

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  17. Muchas gracias, Luna, así debería de ser siempre, pero, a veces en nuestro caminar, tenemos la desgracias de encontrarnos "a unos zopencos" por no decirlo de otra manera, ya que no merecen ser llamados ni tan siquiera personas, porqué, no lo son.
    Un beso grande,

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  18. El maltrato emocional, ese que no se ve pero destruye la mente y la valía de una persona, es casi un asesinato encubierto por sociólogos y psiquiatras, que piensan que la clave está en curar al afectado y no al que afecta. Un tema muy amplio de repercusiones morales y físicas inimaginables... Valiente, denuncia. Ojalá la personas que se comportan de esta manera lo lean para que vean la moneda por otra cara, no sólo la que ellos aprecian y que en su mente enferma, justifican. Al rojo vivo, Mía. Un beso... guerrera.

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  19. Son tan extremadamente tercos e indeseables, que nunca ven más allá de sus naipes, y ellos son los qué se atreven a amenazarte con ponerte un detective y luego, con lo que saquen, denunciarte ante el Juzgado. Así sin más nada, con aviso delante de personas que no conocen.
    Pero, el gran capirotazo, se lo llevaron ellos... por no admitir a tramite tal osadía, qué más bien, era una vil cobardía.
    Solo saben esconder la cabeza, en cuanto oyen... vas a contar con pelos y señales, todo lo qué son incapaces de no decir a su más intimo entorno, entonces, ya no han dicho nada.
    Y, los capirotazos se pueden dar de infinidad de maneras, nunca, cómo ellos... hay qué saber hacerlo y arrearles en sus propias naipes, con extrema delicadeza, para que les siente de lo peor... y, "se consigue" ya lo creo que lo llegas a conseguir, salen con las patas y la cabeza, escondida entre sus pies, como ladrones de sentimientos, que son lo qué van mostrando.
    Y, si de casualidad te los encuentras por ahí... con hacer caso omiso, pues, mi lema es: ¡Si a un muro no le saludas, menos a una pared! Entonces, pasas con más tranquilidad, sin ese miedo que te quieren incrustar entre tus sentidos, y entonces, sí qué les dejas "bien muertos", sin saber qué hacer o que decir, y es la mejor defensa posible.
    Los profesionales de la psiquiatría y psicología, no te atienden, lo mismo que los médicos de familia, solo saben que atiborrarte de pastillas, y cuanto más atontad@ estés, mucho mejor, puntos que se llevan a sus espaldas. Solo miran por ellos y sus bolsillos, nada más... ¡Son las peores alimañas que te puedes encontrar en este mundo insólito! Aunque, es posible, que los haya buenos, pero para poder encontrar algo así, sería una lotería extraordinaria, que solo pasa una vez en la vida... y, no todas las personas tienen esa clara oportunidad.
    Quienes les conocen, los defienden y te dicen... ¡Te has equivocado, has metido la pata hasta el hondón!
    Pero, sigues en tú claro empeño, de quitarte de en medio tal desperdicio y al final, lo consigues, sin ayuda de nadie...
    Un enorme Beso, querida Yolanda,

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