ESTACIÓN DE PENITENCIA

 

Cristo de la espiración

corazón, sin más sentido

que quedarse sin latido

suplicantes de perdón

 

¡Padre perdónalos que no saben lo que hacen!

Gran dolor de madre vivido

y por vivir frío aliento.

más que decir sobre

sus pies se abre el suelo.

en un momento

igual que el mar contra la costa quiebra.

Mil puñales sintió en el duelo

clavando  el pecho columna y piedra.

Treinta y tres llagas hicieron,

dejando  su vida en tiniebla.

Sufriendo como madre parir

tras horas de gran suplicio,

conduce la madre a su hijo.

Dolores de gran dolor.

¡ No debiera pasar por esto en su vida entera!

ríos de lagrimas hacen huella.

Madre de gran dolor, ¡Ella!

Virgen de los Dolores, ¡Madre!

llanto de Viernes, ¡Santo!.

Estación de penitencia.

Al tocar cornetas, y tambores

a Nuestra Virgen de los Dolores.

todo el pueblo respira hondo

lloran de la emoción

con esa puesta de sol al fondo

rojo cielo rojo sangre

Cristo de la Espiración.

 

© Araceli García Martín

Ogíjares

Granada -España

Imagen de Carmen D Rosales