Despacio Voy Hacia Ti

Sentada en tu arena, ahora fresca pero que hace unas horas radiaban calor, llenas de gente deseosas de bañarse en tus aguas azules tanto que se confundían cielo y mar. Estoy frente a ti, estás en calma, de vez en cuando arrastras una ola hacia mí, mojando mis pies, entre un escalofrió y placer siento, estoy sola, que satisfacción tenerte para mi sola. Tantos recuerdos me traen, de ti, amor mío, cuántas veces estuvimos aquí, en este mismo lugar, cogidos de la mano, contándonos nuestra convivencia, a veces alegres que volvíamos a reír al recordarlas, a veces tristes por haber discutido mientras las olas se acercaban como intentando que nos diéramos un beso e hiciéramos las paces, que sabias eran, sabían que algún día estaría yo aquí sola echándote de menos, como recuerdo en noches como la de hoy; nos desnudábamos y nos bañábamos a la luz de la luna, estábamos solos y como cual nos hacíamos el amor , nos damos placer porque éramos el uno para el otro. Siento como la mar me llama como lo hacías tu amor, ven que está caliente, ven no te arrepentirás me decías, hoy aquí y ahora, siento como me llamas, ay amor que sola me dejaste, como saber que tantos recuerdos me dejabas y que nunca podría olvidar, te echo tanto de menos que la vida se me va en ello. Miro al horizonte y te veo con tus brazos abiertos, me llamas, me levanto, voy caminando despacio hasta ti, las olas me arrastran hacia dentro no me importa voy a reencontrarme contigo amor de juventud, de toda mi vida, poco a poco siento como estoy más cerca de ti, el agua me va arrastrando mas dentro y me dejo hundir entre sus arenas y aguas agitadas, ya tan sólo siento tu mirada, quizás tu rechazo, esto no lo querías, querías que siguiera viviendo para contarte cada noche mis planes de seguir, pero no quiero seguir sin ti, amor quiero, necesito estar contigo en este mar que tantas veces nos vio amarnos y eso seguirá viendo amarte es mi existencia y si tú estás en el horizonte yo también estaré allí pero contigo amor. Veo pasar todas mis horas contigo como si de una película se tratara, y al final ya no hay dolor, no hay lágrimas por tu ausencia, ahora estamos juntos en este mar que nos vio amarnos y hoy es nuestro cielo para amarnos.

©Manoli Martin Ruiz