¡Mi único enemigo era yo!

Un día me desperté del letargo de equivocación  aprendí y descubrí que mi único enemigo era yo, si yo con mis propias debilidades, con mis traumas del pasado, con mis paranoias con mis torpes impulsos con mi manera testadura de comportarme a veces.

También me di cuenta y descubrí, de repente que podía ser una persona amada y valorada, me di cuenta que estaba en el camino equivocado, descubrí, que no es bueno dar pena, que no hay que demostrarse tal cual uno es, transparente, sincera...¡error!...Vi  que yo no era la mejor ni tampoco la peor, simplemente me di cuenta que soy humana, que me dejo llevar a veces por mis impulsos, y  quizás no debería y esto me cabrea mucho, sé que lo debo pulir.

Aprendí que lo difícil no es volar muy alto sobre los mares, sino tener miedo a hacerlo, yo soy quien pone sus propias metas, yo soy quién tiene la vara de medir...nadie más que yo, soy quien me detiene, quien no comprende a veces un buen consejo de un amigo/ga  yo quién criticaba, mis actos y no veía  mis muchos defectos ahora no más limitaciones, yo sé que el amor es algo más que una mirada o un beso, es dar sin pedir nada a cambio.

Ayer sin más aprendí, que no soy el reflejo de los demás, que nadie es mi reflejo, yo soy yo, con mis altos y bajos, con mi luz interior, dispuesta a ser querida porqué si, porqué lo merezco, porqué soy una persona con amor, digna de amor, para dar y recibir. Yo soy  alguien que ama de verdad, es la única manera de que nos amen yo soy alguien que buscaba ser feliz, esa es una gran equivocación, la felicidad no hay que buscarla, ella está a nuestro lado, al alcance de la mano, tan sólo tenemos que abrir los ojos del corazón. Yo  en verdad, ahora sé que lo merezco y  desde ahora y para siempre...seré feliz porqué ahora si, tengo abiertos los ojos del corazón y lo demás no importa y mucho menos el pasado, ya no existe ni importa, tan sólo ha sido mi maestro.

¡Fuera  tristezas y viva el amor universal y fraternal!

Feliz miércoles

© Carmiña Carmela