¿PORQUE NO?

 Resultado de imagen de oscuridad


¿PORQUE NO?
Mirando a través de esta ventanilla, veo correr el paisaje tan rápido que a veces no distingo bien los movimientos de las nubes de tan bello paisaje, porque no pararemos un instante para poder dejar reflejado este momento en mi retina, para después regodearme al recordarlo cuando ya no pueda asomarme a esta ventanita de mi mirar, de mi vida propiamente dicho. Cuántos colores diviso desde aquí, cada uno tiene su objetivo, su sentir y su forma de hacer distintas las cosas, porque no puedo vivir en gris, si es así como me gusta, porque me obligan a verlo todo en forma de arco iris y ese color no existe para mí, porque no puedo gritar al rojo carmesí cuando ame con tanta locura que creía ser la única loca del lugar, por amar sin ataduras y sin tabúes. Porque no, puedo ser libre para volar entre tus mundos de fantasía sin tener que pasar por ese color rosa, que tiene más espinas de aroma. Porque no puedo seguir esa estela que dejaron los míos y tan feliz me hicieron, porque esa ventanilla se va haciendo cada día mas pequeña y no me deja ver mis fotos o mis recuerdos o tan solo no puedo ver cómo crecen mis retoños, porque será que ya no hay ni frio ni calor en mi cuerpo, porque no escucho ya mis cantos de días felices y tan solo escucho un rumor lejano de mi mar querida, porque no pararemos y bajarnos un instante para sentir la brisa de marzo en mi rostro, porque no me llama nadie, será que un día de nublados, me encerré en mi mundo, queriendo estar ajena a todo mal, a todo sentir, me volví invisible para todos, porque no tengo ganas de vestir mi vida del arco iris y tan solo tengo el color ceniza por dentro y por fuera, dentro de mi recuerdos bellos por fuera tan solo un día gris y noches de negro satén. Porque no, quiero seguir esa estela y seguir en este mundo mudo y solitario, no necesito ya seguir ese sendero que estaba lleno de luz, ella me hacía daño, en mi mundo nada me hace sentir enferma o humillada, se olvidaron de mi porque yo me olvide de ellos.



© Manoli Martin Ruiz

Comentarios