Oro líquido Negro, que transformas las mentes de los hombres.
Les brillan los ojos al imaginar, todas las ganancias que el incauto dejará.
Te has transformado en veneno cristalino, beneficio de un instante, a la basura irás.
En 500 años quizás te degradarás, en diminutos trocitos de muerte te convertirás.
Recurso mal utilizado, para enriquecer a unos cuantos.
Estelas de muerte nos han regalado, contaminando la tierra, el viento, y el agua de ríos y océanos.
Nos han regalado la comodidad, nos han alimentado la ociosidad.
Que se traduce en enfermedades, que luego pretenden a precios muy altos curar.
Y seguimos comprando muerte, porque a la vista se muestra deseable.
Como miel que es dulce al paladar, pero que su efecto es como hiel.
Es tan fácil culpar a Dios, de nuestra desgracia, seguir lamentando, lo que en nuestra mano está solucionar.
Pero que cuesta esfuerzo, y significa pérdida gradual.
Hemos maltratado nuestro regalo, nuestra casa, nuestro planeta, nuestra tierra.
Que no nos extrañe, que la misma naturaleza se vuelva en contra nuestra, y comience el deterioro en consecuencia.
© Esperanza E. Vargas
Tan cruel y real como la vida misma ese oro negro, matando el planeta para enriquecerse los del poder
ResponderEliminarMuy bueno Esperanza, el dedo en la llaga.
Feliz domingo hoy por fin llueve, después de tres meses de sequía.
Abrazos
Aquí también se espera lluvia mi niña. También hará un poco de frío.
ResponderEliminarGracias por leer.
Besitossszz
Tan real como la vida misma, nunca sabremos lo que pudo ser porque nosotros lo destruimos, besotes amiga
ResponderEliminarGenial respuesta cariño.
ResponderEliminarUna gran verdad.
Un abrazo.
Graciasss