La calle del futuro
está empedrada de interrogantes
de empinadas cuestas horrorizadas
de lo que llaman: Los hombres del presente
esos de blanco guante
y unicejudas frentes.
Con proyectos para viajar por el universo
de agujeros negros, de hombres de negro
llenos de muerte, de vergüenza y hambre
de desahucios al abordaje y dolor.
Destrucción estos, con guantes de plástico
solución ; máscaras a todos los seres
vivos que habitan por sus océanos.
toda la basura hasta allí ha llegado.
Y vacunas del desamor.
nadie puede subir la cuesta descalzo
ni mendigarles un trozo de pan o dos...
no se permitirá traspasar la puerta de casa,
serán acribillados a balazos.
Se cubren las manos,
Son suaves sus manos
las suyas dicen, son las más limpias y lavadas.
Pero son las más negras y sucias,
con huellas de fuel y vertidos sin control-
En ellas quedaron las lagrimas de las manos amarillas,
negras, rojas, manchadas de muerte,
con ojos nublados y gafas oscuras
le echan la culpa al sol, al cambio climático
a la sociedad sin mirarse el ombligo
y sin ninguna duda la culpa es de los demás.
Muerte de niños no nacidos,
de carne y sangre tragada,
entrepiernas desangradas
los cuerpos descansan sin vida
en los brazos de sus madres.
Luego están los amorronados
esos que se reconocen en este
enredo de discusiones por la pésima gestión
ellos visten con trajes planchados y carteras en mano.
Son los adormecidos de lo que se llamaron hombres
del pasado, ahora ya dicen que nació otro espíritu
y su idea es dialogar acordar todo con buenos modales,
pero estos son los hombres de nanas de la corbata blanca
virtud, justicia y bondad, claridad, paz, libertad y cambio.
Los que antaño fueron los supervivientes
hoy son los grandes grajos de metamorfosis
que se ponen la mano en el corazón.
Por esos que ni saben lo que es sentir la presión
el hambre y la continuos abusos del que mete sus garras
bajo la mesa, sus palabras de lengua sibilina
baja cuota para pagar de forma fácil, toda la vida.
La maldad que miente atraganta, asesina,
y no le importa sigue mintiendo, mienten
haciendo creer a aquél que va a la fabrica
sin saber porqué volvieron a ilusionar
a ciegos sin mente, sin querer ver,
lo que puede llegar en el futuro
ni comprenden que todo depende de lo que se hace en el presente.
© Araceli García Martín (14 de mayo de 2000)
No puedo ver muy bien y se me cansa la vista.pero en esta hora de mi desayuno está mas clara por eso me dispongo a leer vuestras letras...
ResponderEliminarMuchas Gracías por llegar y saber que os gustó .
Salud... amigos
FELI VIERNES
Una realidad muy cruda como cierta mi querida Araceli
ResponderEliminarduele leerlo...pero alguien tendra que decir con palabras tan hermosas como las tuyas...un presente que sigue sin cambiar de lugar...
besos
Gracias por tus palabras. María Luisa
ResponderEliminarCreo y espero que los politicos,
de todos los países ,
de TODAS LAS LENGUAS, DE TODAS LAS RAZAS. DE este mundo...
Que se unan. QUE ELLOS...
junto a la JUSTICIA MUNDIAL
JUNTO A TODOS LOS QUE PODEMOS TODOS SEPAN HACER SEPAMOS HACER POSIBLE
con manos unidas. CON UN UNICO PROPOSITO
Normas a seguir sin imponer
solo memorizar las reglas
SIEMPRE POR Y para
nuestro bien...
Un abrazo.
Tremendas letras mi niña. Con la fuerza y coraje necesarios.
ResponderEliminarCon el dolor a cuestas de mirar las injusticias y tantos dramas de la vida.
Y simplemente todo es silencio. Ya llegará la hora de rendir cuentas. Porque de solucionar. Difícilmente lo harán.
Un abrazo mi niña.
Y disculpa mi tardanza. Hay días realmente malos para mi. Y se me dificulta.
Besitos corazón.
Gustosa de leerte.