Y Cayó Suavemente…


Cae lentamente ese vestido rojo por mi espalda ante el nerviosismo de desabrocharle
Para encontrar una piel blanca
Encendida en tus ardores.


Cae ante el temblor de mis dedos que se abrasan
Al contacto de tu hermosa piel provocando
Estremecimientos incontrolados.


Cómo dos adolescentes nos miramos, casi con pudor
Nos tocamos lentamente descubriendo todos los secretos.


Somos dos amantes, mirándonos con amor
Nos adentramos en los rincones más insospechados.


Mis pechos turgentes y ávidos a tu boca
El estandarte de fuego jugando entre mis manos
Y entre besos, caricias mordiscos y arañazos
Vamos destapando en placer cada vez más intenso.


Son tus pechos turgentes los que provocan y mi boca
No espera ni rogar se hace,
Entre mil caricias y mil besos
Vamos obteniendo el placer buscado y anhelado


Detente en la cueva de las risas
Entra, desbócate en ella
Y siente como te atrapo entre mis piernas


En tu cueva me detengo,
No hay prisa me contengo
Tu cuerpo me desea abres tus piernas y entro


Tus manos vendavales en mi piel
En mis pechos, unidos y fundidos, esperando
Alcanzar el más inmenso de los placeres
Sigue dentro de mi amor… hasta desfallecer.


Tocar tu cuerpo es tocar un volcán
Mis manos incansables buscan darte
Y darme ese placer esperado
Tus pezones encrespados se hunden en mi pecho
Sigo dentro amor… mi vigor aún aguanta.


Quiero sentir como absorbes los líquidos sagrados
Y llenarme de ti en una unión perfecta
Cierra los ojos, aprieta fuerte mis manos y grita, grita, gritemos, hasta llegar al clímax.


Siénteme como bebo y disfruto de tu ambrosía
Apriétate a mí en esta unión que deseamos nunca termine
Quiero seguir viendo los ojos tuyos y ver como temblamos al alcanzar la cúspide


Mientras mis labios, buscan los tuyos con rabia
Con pasión, amor y el deseo
Que siempre pide más entre tú y yo


Yo con mis dedos froto tu botón del placer
Te hago venir una y otra vez y suplicas más y más,
Mientras dentro de ti sigo y culmino contigo.


Y cayó suavemente ese vestido rojo por mi piel
Y nos amamos toda la noche como adolescentes aventajados…
¿Me das un beso? O me amas otra vez.


Déjalo ir… es linda tu piel roja por el placer suave como el terciopelo
Si, nos amamos, la noche fue corta, sigamos al alba…
¿Un beso, mil te doy? Dame una tregua y amémonos otra vez.


© María Luisa Blanco & Greg D.




[youtube https://www.youtube.com/watch?v=Zs135e79PYA&w=560&h=315]

Narrado por Yvonne Torregrosa y Andrés Fernández.

Comentarios

  1. Jopé...…, qué intensidad tan erótica, sensual y seductora desgranan vuestros versos hechos a la par, en dúo, a cuatro manos; uniendo letras, inspiraciones y emociones, para dar como resultado lo aquí expuesto. Abrazos.!

    ResponderEliminar
  2. jajaja a cuatro manos...!!! gracias Javier en nombre de los dos

    ¡Abrazos!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario