Con la insistencia de una noche de primavera
cae la lluvia acompañada de suspiros
el roce de tus labios en mis pétalos
sutil caricia, azul, de amor infinito.
Tus raíces, abrazando mi cintura de diosa esbelta
de mirada de azules pensamientos
de latidos empapados por la lluvia
sutil el roce de una gota que alivia,
el ruborizar de nuestros tallos.
Caen con insistencia las gotas de la vida
¡queriendo quizás! quebrar nuestro amor
tan frágiles, tan fuertes, tan unidos
cómo los nudos que el tiempo nunca desato.
Te miro, te abrazo contra mi pecho
en este azul instante de un te quiero
como un susurro de viento
como beso, como agua de calma y aliento.
Suave color, suave ternura
en el roce apasionado de nuestros pétalos azules
donde late un corazón rojo inadvertido a vuestros ojos.
Mi amor, nuestro amor es único
es dulce, brillante por la lluvia
es indestructiblemente azul
cómo un suspiro en la noche.
© María Luisa Blanco
Vale la pena leerlo dos veces y hasta tres. Y cada vez lograr adentrarse un poco más al rojo corazón que lo ha sentido. Excelente mi niña. Floresciente y azul sentir.
ResponderEliminarBesos. Yo más.
Por aquí ando jeje.
Metáforas de azules pensamientos
ResponderEliminarTe miro te abrazo
La unidad que hace la gran fusión del amor .
Bello versar .
FELICIDADES
Bello poema, Mª Luisa. Y cargado de sentimiento, donde, además, le has puesto todo el corazón. Abrazos.
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