https://www.youtube.com/watch?v=jpcnRKbIY_Y
Sencillamente... dejarán verse en un espacio contiguo a la paz
dando paso a un estado sin igual, dónde se recuperarán del estado
simplificando sus tensiones y reflejos, a una mínima parte de su ser...
Entramos a formar parte de ese todo magnífico qué es la noche,
donde los pensamientos dejarán de ser libres y volarán a poder
pasar y descansar, para aprovechar el tiempo qué perdieron,
Hacía un mundo imaginario llegaremos y podremos observar qué,
las estancias se simplifican y dejan de verse a colores diversos,
para pasar a vivir otra época que lindará con las horas del día siguiente
más los decibelios se personarán entre las mieles de ocaso singular.
Es ya la hora de sentir lo que se te negó en el día, para vivir de otra
forma, esos sentimientos ocultos que quedaron inmersos en un bypass
trasladándose a una esfera mucho más amplia y segura.
Será ocasión de conocer ese formato qué se plasma,
llenando de calidez el entorno más inmediato que se verá
tan especial y relajado, qué surgirán nuevos estrenos a ser...
divisados desde lo más cercano a lo más lejano...
La estancia ya será dentro de la gran diversidad, y las emociones
fijarán su vez, para llegar y ser encontradas cómo si de un placer
tratarase de ser esa fruta madura qué al principio era un perfume
de rasgos aterciopelados y se tornó un rico y especial manjar,
al convertirse en esa estela qué se deja ver cada día en la noche
cuando sale a pasear con su gran amor, el Sol Naciente...
Y los minutos con los segundos y las horas, ya se vistieron de osadía,
al salir al encuentro ese manto desarrugado, negro y estrellado qué es...
la noche perfecta, la que se fija y por horas interminables se queda...
refilándose cómo si de ella fuese toda la eternidad... es descarada
y... no sabe darse el placer de salir corriendo y esconderse, para
qué no la atrapen... vagando en solitario, hasta encontrarse jugando
al inglés escondite, ese qué se percata de todo y de nada a la vez...
Palencia, a sábado 03 agosto 2019.
Poema n.63/2M19.
©Mía Pemán
Sencillamente... dejarán verse en un espacio contiguo a la paz
dando paso a un estado sin igual, dónde se recuperarán del estado
simplificando sus tensiones y reflejos, a una mínima parte de su ser...
Entramos a formar parte de ese todo magnífico qué es la noche,
donde los pensamientos dejarán de ser libres y volarán a poder
pasar y descansar, para aprovechar el tiempo qué perdieron,
Hacía un mundo imaginario llegaremos y podremos observar qué,
las estancias se simplifican y dejan de verse a colores diversos,
para pasar a vivir otra época que lindará con las horas del día siguiente
más los decibelios se personarán entre las mieles de ocaso singular.
Es ya la hora de sentir lo que se te negó en el día, para vivir de otra
forma, esos sentimientos ocultos que quedaron inmersos en un bypass
trasladándose a una esfera mucho más amplia y segura.
Será ocasión de conocer ese formato qué se plasma,
llenando de calidez el entorno más inmediato que se verá
tan especial y relajado, qué surgirán nuevos estrenos a ser...
divisados desde lo más cercano a lo más lejano...
La estancia ya será dentro de la gran diversidad, y las emociones
fijarán su vez, para llegar y ser encontradas cómo si de un placer
tratarase de ser esa fruta madura qué al principio era un perfume
de rasgos aterciopelados y se tornó un rico y especial manjar,
al convertirse en esa estela qué se deja ver cada día en la noche
cuando sale a pasear con su gran amor, el Sol Naciente...
Y los minutos con los segundos y las horas, ya se vistieron de osadía,
al salir al encuentro ese manto desarrugado, negro y estrellado qué es...
la noche perfecta, la que se fija y por horas interminables se queda...
refilándose cómo si de ella fuese toda la eternidad... es descarada
y... no sabe darse el placer de salir corriendo y esconderse, para
qué no la atrapen... vagando en solitario, hasta encontrarse jugando
al inglés escondite, ese qué se percata de todo y de nada a la vez...
Palencia, a sábado 03 agosto 2019.
Poema n.63/2M19.
©Mía Pemán
Me encanta Mia. es el grado de confort de descanso, y revitalizarse … bella feliz martes.
ResponderEliminarBesitos.
reCáspita, sí qué has llegado pronto... Caray, AraCeli...
ResponderEliminarMientras estaba editando Letanías, para añadirle la fecha de la publicación en Letras Guarida... madre mía, has corrido cómo el viento... jajajajaja... jajajajajaja...
Ostras, qué maravilla... Eres, la Osa Marina...
Me alegro mucho qué te guste, lo publiqué primero en la página de Letanías, ahí... fue un vuela pluma, aquí... ya más completito, con su titulación y todo... jajajajaja... jajajajajaja...
Besos de fresa y chocolata... Petonets y Besiños, Hermosa y querida amiga... al Martes, ya le hemos estrenado... jajajajajaja...
Azul...., azul todo azul, como el mar todo azul...…, un bonito color para descansar, sabiendo que tras ello vendrá el nuevo día con toda su actividad. Feliz día, pues. Abrazos.
ResponderEliminarMe gusta todo el azul que llevan tus tus letras Mía, es relajante y hermoso. Invitan al relaj y el confort. Gracias! Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias Herque... es qué, es en sí, el relax que lleva la música, de ahí salió el poema.
ResponderEliminarOtro abrazo,
Tú color preferido... y no solo os gusta a vosotros los hombres, qué también hay mujeres qué así lo tienen a su lado.
ResponderEliminarA mí hace años, no me agradaba nada, pero con el tiempo, me ha ido calando poco a poco...
A pesar de qué el mar, y su azul... es agradable, hasta cierto punto...
Desde muy menuda lo he visto cada verano en agosto en las playas del Norte castellano, santanderinas... pero, me daba pavor...
Feliz lunes y su semana nueva Javier... Abrazos.