Con Soberbia

Y asi sin darnos cuenta despertamos un día y todo va cambiando, en la ciudad de los mejores genios en tecnología y concurrida hoy decierta, en Disney se apagó la magia, la muralla china no era tan fuerte como se pensaba, ahora New York si duerme, latinos con su floclor ahora en pánico, ningún camino quiere conducir a la gran Roma.
Por un virus que ahora se corona como dueño del mundo y nos intimida, nos dimos cuenta de cuán frágil somos, nuestro escudo un cubre bocas..
No sabemos si el daño es a propósito por el hambre de poder que corroe este planeta o irresponsabilidad de nosotros mismos, lo único sertero es que la amenaza está ahí cada día más fuerte mas latente. Al principio todo era un chiste, ya los memes no causan tanta risa, ahora los abrazos y los besos se convirtieron en armas muy peligrosas para dañar lo que mas queremos y la escasez de suministros nos demuestra una vez más cuán egoístas somos y la poca empatía que tenemos..
tan egoístas que pensamos “no hay problema, este virus solo se lleva a los viejitos” "a los mas enfermos", como si no tuviéramos a nuestros padres, abuelos o como si nosotros jamás fuesemos a llegar a esa edad, como si fuésemos inmune a cualquier calamidad, queremos hacer valer nuestros "derechos" de decidir si dejar vivir o no a otro ser y ahora nos damos cuenta que no podemos ni decidir ni exigir por la vida de cada uno de nosotros, un planeta que decidió y eligió que Dios no existe sin haberlo buscado, ni darse a la tarea de escuchar su palabra..
Donde nos advierte ante todo que es él quién puede con todo!
Una humanidad que hoy se pone una máscara no solo para un virus si no para tapar nuestro miedo y vulnerabilidad mezclada con soberbia.

© Yuli Pau Corgue