Cuando todo esto haya pasado,
cuando este pesado yugo deje de oprimirnos;
cuando volvamos a ser libres y redimidos,
y apreciemos de verdad lo conseguido.
Cuando quede todo en un mal recuerdo
y podamos volver a saludarnos;
a besarnos y a abrazarnos,
y juntarnos sin que peligremos ni tú ni yo.
Cuando la alegría vuelva a nuestras vidas,
la música inunde nuestras calles,
atestadas como estarán de gente por legiones,
cantaremos y bailaremos al compás de las buenas nuevas.
Cuando recobremos todo lo conseguido,
tras poner todos nuestro granito de arena;
homenaje haremos a quienes nos propiciaron la cura,
con un monumento que perpetúe su valor y su arrojo.
Cuando quede todo en un mal sueño,
en el justo momento que así ocurra,
saldremos todos a las calles en estampida
para celebrar que fue acaso sólo un espejismo.
© J. Javier Terán.
Con la misma calma o la vista de la primavera casi sin darnos cuenta todo llegará …
ResponderEliminarQuerido poeta J Javier entrañables letras
te abrazaría y te besaría, por ahora mejor
solo los codos...
SALUD
Muchas gracias, Araceli. Lo mismo... Y sí, mucha calma y que pasen los días... Paciencia y esperanza, pues. Abrazos en la distancia.
ResponderEliminar