Es un adiós un jarro de agua fría
el deshielo del alma
gota a gota chocando contra el suelo
rompiendo entre olvidos los sueños.
Lentamente, como una muerte desordenada
que ha perdido el ritmo del tiempo
evocando aquellos tiempos victoriosos
de sábanas blancas y rostros, rostros ocultos….
Un adiós quizás para siempre
en un volveré, envolvente de reclamos
en el silencio, enmudecen las palabras
náufrago y presagio...silentes llantos.
Desmenuza cada arteria que oprime mi pecho
entre coágulos transparentes
rojos misteriosos de sangre rota
en el suburbio de estos pensamientos.
Es un adiós o un alma descolorida
o unas risas enterradas bajo la tierra firme
custodiada por alguna margarita
algunas palabras sueltas, como escritas en el cielo...
La luz tan clara se ensombrece
como si el sol se hubiera escapado
sin despedirse, cansado, reclamado
pero los ojos cerrados nunca dejan ver la luz.
Entre mares salados, hielo, ausencia
no importan las despedidas, las huidas
o un adiós sin pronunciar para no hacer ruido
en el sigiloso paso, quizás eterno...quizás nada.
En el vacío de un escarpado barranco
cielo y mar juntos ante la mirada triste
olas chocando con la brusquedad del tiempo
indefinido en mi pecho...indefinido...
Como la muerte que se pierde en los fangos del miedo
como la vida que sigue muriendo lenta
entre risas ensordecedoras
mullidas de silencio y lágrimas.
Solo es un adiós, una palabra
un vértigo en el instante exacto de un latido
que pronuncia algún nombre
entre borrosos epitafios...silencio.
Quizás sea...o no exista
sin saber si he cruzado esa línea tangente
torcida, silencio y adiós...
en la mueca que viste mis labios con un beso.
Rojo sangre...incolora el alma
triste el adiós que entierra el corazón
entre mares de sangre...tan azul el cielo.
© María Luisa Blanco
Un continuo contraste de colores, con algún no color por el medio, son tus versos, Mª Luisa, que quieren adentrarse por momentos hasta lo más profundo del alma, tratando de espolear un conjunto de sentimientos que incluso hasta pueden llegar a ahogar, si no se lanzasen al exterior mediante poemas como éste. Abrazos.!!
ResponderEliminarAquí han cambiado los colores, pero sigue habiendo esa profunda tristeza.
ResponderEliminarBesos guapa.
Versos cargados de una triste melancolía, de un adiós sin retorno.
ResponderEliminarMe parece una obra de arte María Luisa, este párrafo me ha encantado:
Como la muerte que se pierde en los fangos del miedo
como la vida que sigue muriendo lenta
entre risas ensordecedoras
mullidas de silencio y lágrimas.
Enhorabuena!!!
Un abrazo🌹
Buen trabajo, compañera
ResponderEliminar